Me paro a obsevar como coge el pitillo y lo enciende (aunque es tan idiota que no sabe ni encender un mechero). Odio que fume, pero adoro verlo fumar. Me podría pasar horas, días.. Me gusta ver como inspira el aire & lo expira poco a poco. Se toma su tiempo, calada a calada.Y yo mientras, sentada, me fijo en cada un de sus gestos. Que sí, que me los conozco de memoria, pero aun así sigue siento todo un espectáculo.
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eh, ¿dónde ivas? Originalidad ante todo.. :)
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