Hoy,

me apetece sonreír. 

Y te animo a que tu lo hagas, no dejes que nada ni nadie borre tu sonrisa.

te quiero, y cuándo digo te quiero es te quiero y punto.

Estoy completamente loca por ti. No dejo de pensar en ti. Estas en mi cabeza, en mi corazón, en cada centímetro de mi puta piel. Te necesito, quiero besarte, abrazarte, mirarte a los ojos y decirte tantas cosas, entre ellas que te quiero. Pero tu a mi no. Y no hay más vuelta de hoja...

Solo tengo que encontrarte.

Creo que ya va siendo hora de coger un globo terráqueo y juguémos a hacerlo girar y con los ojos cerrados pararlo en nuestro próximo destino, y si no nos gusta ese, repetir, y repetir, y repetir, hasta dar con el más cofortable. Viajar allí, dejar de hablar de tú y yo, hablar de nosotros. Yo para tí y tú para mí. Depender el uno del otro, considerarte mi oxígeno, decir que sin tí no puedo vivir, que me hicieras sonreir con solo mirarme, decirte que te quiero que yo sin tí no puedo.

Odio tu sonrisa; odio esa perfectísima sonrisa.

La odio porque cuando sonríes, me vuelvo totalmente impotente, impotente por no ser capaz de apartar mi mirada de ella, de ti. No sé como lo haces, pero eres capaz de volverme loca con tan solo un movimiento y es algo ilógico porque yo no soy una persona que se sorprenda a la mínima es más, creo que hasta soy difícil de sorprender, pero tu.. tu eres diferente, lo cambias todo y me cambias, me vuelves mejor de lo que soy , sacas todo lo bueno de mi y haces que las imperfecciones solo parezcan pequeños añadidos, me haces perfecta y te haces perfecto y entonces, me entran unas ganas enormes de besarte para comprobar si realmente eres real, si estas aquí y tu.. tu vuelves a sonreír y el mundo se me viene encima, mi mirada busca la tuya, mis manos acarician tu cara y el mundo empieza a temblar.

Señorito Daniel:$

Nadie logra entenderme. Pero porque nadie sabe lo que es estar enamorada de ti, la cara de gilipollas que se me queda cuando te veo por el barrio y más cuando te veo en la piscina. No saben lo que es mirarte a los ojos, que me tiemblen las piernas y tu ni siquiera me mires. Y… si, es cierto que no te saludo cuándo te veo. Estoy demasiado ocupada pensando: “¡ay madre, que es él!”, y cuando me quiero dar cuenta estoy igual de roja que la gorra de Duffman, y tú ya has pasado de largo. Todas dicen que eres un cabrón, niñato, etc. Y tienen toda la razón pero ¿sabes? aun así, te quiero. Y lo que digan las demás, te puedes imaginar por donde me lo paso. Y… claro, que ha habido otros tíos. Sinceramente, creo que gracias a ellos y sus putadas, me fui olvidando de las tuyas. No creo que siga enamorada de ti, pero cuando te veo vuelvo a pensar que sigo igual que antes. No sé que tienes pero, eres mi debilidad. Después de leer todo esto, alguna que otra me dirá que eso nos pasa a todas pero… no. ESTO me pasa a mi, contigo. No eres el típico tío que se añade a una lista, tú lo sabes y yo lo sé. Y precisamente por eso no dejo de intentarlo, porque tú lo sabes… y no has intentado detenerme.

Sorpréndeme otra vez:)

+Agh, otra vez con hip hipo

-Con algo sorprendente, se te va el hipo

+No, es con hip un susto

-Pero también basta con una sorpresa cualquiera, no hace falta asustarte

+Que hip no, te estoy diciendo que es un hip susto

-Te lo demostraré, cabezota

+Venga hip listo- y la besó, la besó como nunca la habían besado. y vaya si se le fue el hipo, el hipo, la respiración y el corazón también del pecho

-¿Ves? ya no tienes hipo

+Vaya, creo que todavía me queda un poco, sorpréndeme otra vez, anda